Así, la EEA subraya además que los datos demuestran que casi todos los fabricantes deben reducir las emisiones para poder llegar a los objetivos de 2015 de la legislación europea para los vehículos de pasajeros, de acuerdo a la media de emisiones de CO2 de cada casa automotriz.

En este sentido, recuerda que el tráfico rodado es responsable del 17,5 por ciento de todas las emisiones de gases de efecto invernadero en Europa y que estas aumentaron un 23 por ciento entre 1990 y 2009.

Para disminuir las emisiones de CO2 del sector transporte por carretera, la legislación Europea ha introducido un mandato que limita las emisiones de CO2 para los nuevos vehículos de pasajeros.

Asimismo, indica que el nivel de emisiones medio para los nuevos coches registrados en la UE en 2010 era de 140,3 gramos de CO2 por kilómetro. Sin embargo, los fabricantes deben lograr un nivel de 130 gramos de CO2 por kilómetro en 2015 como valor medio para su flota de nuevos coches de la UE.

Los objetivos específicos de emisión son asignados a cada fabricante de coches dependiendo de la media de vehículos de masas que produzca.

Los nuevos datos publicados este martes por la EEA consideran la distancia a los retos de 2012 y a 2015 para los coches vendidos en 2010, y muestran qué fabricantes deben hacer mayores avances para llegar a estos objetivos.

"La población actual utiliza muchas formas de transporte, pero los vehículos todavía representan una gran parte de la vida diaria", ha insistido la directora ejecutiva de la EEA, Jaqueline McGlade, que ha añadido que los datos demuestran que la mayoría de los fabricantes tienen que llegar aún a sus objetivos individuales para 2012. "Sin embargo, otros muchos necesitan continuar en su tendencia actual año a año para mejorar su eficiencia", ha concluido.

Fuente ecodiseño